Se busca crear una experiencia integral que brinde al niño herramientas para complementar su conocimiento y educación, esta experiencia se construye a partir de diferentes actividades que se encuentren en el mobiliario, ya que así permitimos que el niño tenga un espacio especial y privado para desarrollarse. Las actividades son acorde a su edad (lúdica y motricidad) y buscan activar sus sentidos permitiendo que se cree un escenario nuevo y diferente que los aleje de la moda o tendencia, la tecnología.

 

La ebanistería que trabaja la madera, nos permite experimentar con formas, manteniendo la rigidez, la estructura y el equilibrio, además se le pueden dar bastantes acabados que permiten configuraciones interesantes que convivan con los sentidos del niño; con la marroquinería se busca dar calor y cercanía al mobiliario, ya que es un material flexible, fácil de trabajar, agradable a la vista y al tacto, es un material que tiene larga vida útil si se trabaja adecuadamente, se encuentra en diferentes calibres, colores y texturas, y permite configuraciones complejas debido a sus características, además su composición transmite historia y familiaridad, ; la forja por el contrario nos permite crear varios componentes que generen balance a el mobiliario para dar firmeza, estructura y seguridad para que un niño o varios los puedan usar., además para que un adulto tenga confianza a la hora de adquirirlo.